Buscando a Julito

El 27 de Octubre de 2010 participé como ayudante de campo del Censo que se realizó en nuestro país.
Fue una jornada intensa, difícil y agotadora para los que trabajamos en ella, que empezó a las 7 de la mañana y duró hasta las 2 a.m.
Mi función era ayudar a los jefes de radio y al jefe de fracción en todo lo que hiciera falta.
Alrededor de las 22 hs, noté que una de mis compañeras, Moni, estaba muy atrasada con la entrega de planillas y con la supervisión de los censistas.
Me dirigí al aula donde estaba para ver que necesitaba. Entré, y al ofrecerle mi ayuda, me dijo que no me preocupara, que le había pedido al marido que viniera para darle una mano.
A punto de retirarme, me llamó:

- Esperá que te presento a mi esposo.

Sentado en una silla detrás de un escritorio, tapado por cajas y papeles, se encontraba un señor de cara bondadosa y aspecto bonachón.

- Querido, te presento a mi amiga (?). Trabajamos juntas desde hace años en la misma escuela... Ella es Vir, la hermana de Julito el profesor de Biología que te presenté en la comida de fin de año de la escuela 31, ¿te acordás? Vir, te presento a Víctor, mi esposo.

El marido me tendió la mano mientras me decía:

- Un encanto tu hermano, te felicito. Un amor de persona.

Me quedé muda por unos instantes. Apenas reaccioné les dije:

- Me parece que están en un error. No tengo ningún hermano que se llame Julito ni que se dedique a la docencia.

Moni y Víctor me miraron incrédulos. Sin más, Moni agregó:

- ¿Cómo qué no tenés un hermano que se llame Julito? ¡Pero! Dejate de bromas te lo pido por favor...
- Es que no tengo ningún hermano que se llame así...
- ¿Vos me estás cargando a mi? -protestó Moni con cara de pocos amigos- Las veces que hemos estado Julito, vos y yo...
- Moni, te debés estar confundiendo con otra persona...
- ¡No me estoy confundiendo nada! Vos sos Virginia Prieto, profesora de Historia y trabajamos juntas en la escuela. Y tu hermano se llama Julito.
- Mirá Moni, lamento tu confusión pero NO tengo un hermano llamado así.
- ¿Me lo vas a decir a mi? Por favor... Tu hermano se llama Julito. Y punto.
- Pero..
- ¡Pero nada! ¡Vos siempre la misma!

Ante su reacción me pareció mejor dejarla en su confusión y no agregar nada más.
Dije:

- Después los veo

Y me fui. Al llegar a la puerta del aula alcancé a escuchar:

- Esta chica siempre igual. Siempre la misma... Hace chistes de todo... Pero es buena...

Cerca de la una de la mañana, Moni se acercó al aula donde yo estaba ingresando los datos en la compu y me entregó sus planillas terminadas como jefa de radio. Me saludó con un beso y agregó:

- ¡Chau desmemoriada!

La seguí hasta la puerta de entrada de la escuela y la ví subir a su auto del lado del acompañante. Mientras arrancaba, Víctor sacó la mano por la ventanilla y dijo:

- Saludos a Julito

Habían pasado muchas horas desde que había llegado a trabajar en ese día atípico en el que se murió un ex presidente, censamos a casi toda Villa Tranquila, nos quedamos sin agua, por ende, sin baños desde las 16 hs y trabajamos sin descanso. Me acordé del sticker del Censo 2010 que decía Gracias por responder y que se entregaba en cada casa después de haber sido censada. No podía menos que continuar con el espíritu cívico que me había acompañado todo el día y responder al amigable saludo de la única forma posible:

- Serán dados

Porque después de todo... Un saludo no se le niega a nadie, ¿no?